Tras el incendio ocurrido el verano pasado, la casa de Ana Obregón en Mallorca vuelve a ser foco de noticia tras el anuncio de su inminente puesta en venta. Este ha sido el segundo verano que la actriz disfrutaba de unas vacaciones junto a su nieta Ana Sandra en 'El Manantial', y parece que será el último.
La residencia que construyó su padre Antonio García en los años 60, es el remanso de paz donde Ana Obregón guarda sus más preciados recuerdos de veranos junto a su familia, que a menudo comparte a través de sus redes. Aprovechamos para enseñarte algunos de los rincones de la casa, cuya joya de la corona es, sin duda, la espectacular terraza con vistas al mar. ¿Nos acompañas?
El dormitorio principal es el lugar de descanso de la actriz, donde, al igual que en el resto de la casa, siempre está presente el recuerdo de su hijo Aless: un retrato de ambos ocupa la mesita de noche, justo al lado de su almohada. Se trata de una estancia de amplias dimensiones, rebosante de luz natural gracias al acceso directo a una espectacular terraza y decorada con un estilo tradicional en tonos cálidos.
Siguiendo con la decoración costumbrista en tonos tierra y estampados florales, una mesa redonda situada a los pies del chaise longue compone la zona de lectura y trabajo para la actriz. No nos cabe duda de que los impresionantes ventanales que miran hacia el mar han sido la fuente de inspiración perfecta para la presentadora cada vez que se sienta frente al ordenador a escribir. La elección de la pintura blanca de las paredes, junto a unas cortinas sencillas de motivos florales dan un toque elegante a la par que acogedor a toda la estancia.
La vegetación multicolor que rodea a la casa la convierte en un lugar perfecto para desconectar y relajarse. Situada a 140 m de un acantilado, la terraza cuenta con unas vistas envidiables y el privilegio de unos amaneceres y atardeceres únicos sobre la costa este de la isla balear.
Nos encanta la forma en la que el diseño de la espectacular terraza incorpora la vegetación del paisaje para proporcionar sombra, y la elección de baldosas azules que dan un efecto de continuidad sobre las aguas turquesas del Mediterráneo al fondo.
Como no podía faltar en cualquier terraza de ensueño, la de Ana cuenta también con una amplia piscina acompañada de zona de chill out. La elección del set de jardín en blanco junto a una moderna lámpara exterior de pie le da un toque fresco y limpio a toda la zona exterior, ¡no podría ser más acertado!
La casa, que construyó el padre de la actriz y que acoge a la familia durante los veranos desde los años 60, ha pasado por varias reformas, pero conserva el diseño arquitectónico original. El interior está compuesto por siete dormitorios con baños en suite, salón y cocina. Sin embargo, la mayor parte de la actividad familiar se desarrolló siempre en el exterior, e incluso actualmente podemos ver a menudo a Ana en sus redes meditando o practicando yoga en la terraza, que seguirá disfrutando ahora en compañía de su nieta. Es por eso que, aparte de moderna y sofisticada, el diseño de la terraza está pensado para ser funcional: zonas verdes, una preciosa pérgola con aire bohemio para proveer sombra en el caluroso verano mallorquín, tumbonas y un porche, ¡lo tiene todo!
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