Esta minicasa que se encuentra entre las montañas del norte de Nueva York es una obra de arte de la arquitectura. Se trata de una cabaña en forma de triángulo equilátero hecha de madera de pino macizo y módulos de vidrio, que sigue las reglas del estilo minimalista y es muy original. El estudio de arquitectura Big-Bjarke Ingels Group de Copenhaguen (Dinamarca), se inspiró en el diseño de una tradicional tienda de campaña con el objetivo de construirla con materiales 100% reciclables, lo que hace que sea una casa responsable con el medio ambiente, ¿te vienes con nosotros para verla por dentro?
La casa en forma de triángulo hecha con materiales reciclables
La naturaleza que rodea la casa también se funde en su interior con materiales como el corcho que reviste las paredes y la madera de abeto de los suelos aportan un toque de naturaleza dentro del hogar. En la zona de relax del salón, la gran protagonista es una chimenea de leña que acompaña al descanso y crea una atmósfera acogedora insuperable que se contrapone al paisaje externo del bosque que crea una sensación de frío y humedad. Gracias a la chimenea la temperatura del interior de a casa es muy confortable y permite contrarrestar las bajas temperaturas del bosque que traspasan los grandes ventanales.
¿Vivirías en 17 metros cuadrados? Esta mini casa es perfecta para ti.
El espacio de la cabaña tiene 17 m2 y transmite mediante su diseño 'hyggelig' una sensación acogedora de comodidad, respira una presencia amable y de paz interior. Esta minicasa, además de por su curiosa forma, también se caracteriza por tener siete piezas de vidrio que permiten que la luz natural ilumine los interiores.
La estructura está ligeramente elevada por cuatro pilares de hormigón, brindando un soporte óptimo y permitiendo a los propietarios colocar su pequeña casa incluso en las áreas más remotas, sin tener que desmontarla porque se puede trasladar entera. El diseño evoluciona desde la tradicional cabaña en forma de A, conocida por su techo inclinado y paredes en ángulo que permiten un fácil desagüe de la lluvia y una simple construcción. ¿Entramos en su interior?
Salón de la cabaña.
El interior de la pequeña cabaña sigue una línea minimalista en la que priman los materiales de madera tan característicos del estilo de decoración nórdico que permiten aportar calidez y hacer frente a las bajas temperaturas del invierno. Los acabados de madera se contraponen a las paredes de color negro que transmiten una sensación de elegancia y seriedad.
Dentro de la mini casa podemos encontrar una pequeña cocina, con muebles de madera hechos a mano, y un baño forrado enteramente con listones de cedro natural que crea el efecto de tradicional sauna. ¿Te verías capaz de vivir en un espacio tan reducido?
Cocina de la mini casa.
Aunque esta cabaña tenga poco espacio, cuenta con todas las comodidades necesarias para vivir y tiene unos acabados inmejorables cómo muebles hechos a medida y de materiales naturales y reciclables. El diseño arquitectónico es una obra de arte porque su forma tan original de triángulo equilátero sobresale entre todas las demás minicasas del mercado.
Baño de la mini casa.
Y aquí vine la pregunta del millón, ¿estarías dispuesto a renunciar a grandes espacios para poder estar en contacto con la naturaleza? Hoy en día, cada vez más gente se decide por abandonar la ciudad y dejar atrás el bullicio y estrés para pasar a una vida más tranquila en medio del bosque gracias a las minicasas.
Esta tendencia no solo se trata de vivir en espacios reducidos, sino que es un estilo de vida que se define por las ansias de libertad, contribuir a la sostenibilidad al 100% y construir con un alto nivel de artesanía y diseño arquitectónico.
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