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¿Existe el armario perfecto?

Pues sí, es el que se adapta como un traje a medida a tus necesidades reales de almacenaje. Es decir, el que tiene las barras justas para las ropa que tienes que colgar, las baldas exactas para la ropa doblada y los accesorios necesarios para que dentro de los cajones. Si quieres conseguirlo coge la cinta métrica para que sus huecos sean perfectos para ti. 

2.

Para las chaquetas

Un armario estándar mide 60 cm de fondo, el espacio que necesitan prendas como chaquetas y americanas para caber perfectamente. ¿Y de largo? Calcula para ellas un hueco de unos 105 cm de alto. Guárdalas siempre abrochadas, en perchas de madera resistentes. Pon una por percha y calcula que entre ellas y la siguiente prenda queden un par de dedos, para que no se arruguen. 

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Para los vestidos

Si son largos asegúrate de que tienes un hueco suficientemente alto para que su parte inferior no se arrugue. Para los largos necesitas un hueco de 170 cm de alto, mientras que para los estándar basta con unos 110 cm. A la hora de organizarlos puedes separarlos por usos (de diario o de fiesta) o por colores, como prefieras. Los que sean más delicados mejor si los guardas dentro de fundas. 

4.

Escalera de color

Nos encanta guardar las camisas de esta manera porque después son mucho más fáciles de localizar. Puede ser de más claro a más oscuro o al revés. Si no te convence esta división, puedes separar las lisas de las estampadas. Cuélgalas en perchas siempre iguales, se adaptan mejor entre ellas y, además, queda mucho más estético. 

5.

¿Cuántas camisas te caben en la barra?

Hay una fórmula para calcularlo. Consiste en multiplica el número de prendas que tienes de cada por lo que ocupan de perfil. Así, si tienes 5 camisas y sabes que de perfil te ocupan 3 cm puedes calcular que necesitas 15 cm de barra para ellas. Las camisas, además, necesitan un hueco de unos 90 cm de alto. Tenlo en cuenta

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El dilema de los pantalones

En perchas, pantaloneros, doblados... Hay varias escuelas a la hora de guardar los pantalones, aunque los pantaloneros extraíbles son los que aúnan practicidad y un mejor aprovechamiento del espacio. Lo que no debes hacer nunca es poner varios en una misma percha. A la hora de encontrarlos y guardarlos es más engorro. 

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Oda al pantalonero

Son una buena inversión dentro de tu armario ya que te permiten ver y acceder de forma rápida a tus pantalones. Si tienes varios, como aquí, puedes usar uno para los pantalones de diario y el otro para los más formales. Pon, como mucho, dos por cada percha. Ten en cuenta que en uno hueco de 40 x 60 x 70 cm te caben 11 pantalones, y si pones dos por barra 20. 

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Altura para tus abrigos

Lo más largo, como gabardinas y abrigos, requiere huecos de hasta 170 cm de alto. Por eso, son muy prácticas las barras hidráulicas que sacan partido a toda la altura de los armarios con barras que tienen un tirador que permite bajarlas cuando hay que acceder a alguna prenda. Si te sobra algo de espacio aún puedes aprovechar la parte inferior con cajas.

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Una percha para cada cosa

1. La de mango largo es ideal cuando las barras son muy altas. 2. La mini para cinturones evita que colonicen todos los rincones. 3. La de pinzas es muy práctica para colgar outfits completos de camisa y falda. 4. La percha para fulares los mantiene todos juntos y a la vista. 5. La corbatera tiene sitio para 20. 6. Esta es la clásica de madera. Todas son de El Corte Inglés.   

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Apila sin abusar

Planifica la distancia entre baldas de, como mucho, 35 cm. Si haces pilas demasiado altas se acaban desmoronando, sobre todo, cuando tienes que coger una prenda que justo está debajo del todo. Si puedes planifica baldas extraíbles, así podrás aprovechar mejor todo su fondo. A la hora de colocar los jerséis hazlo por colores y en escalera, así ves bien todo lo que tienes. 

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Lo que hay que doblar

El ancho que ocupa la ropa doblada te marcará la longitud de las baldas que debería tener tu armario. Ya sabes, guarda solo lo justo doblado, como mucho jerséis gruesos y alguna camiseta. En las baldas no tiene sentido el doblado vertical a lo Marie Kondo, resérvalo para lo más pequeño en cajones o cestos. Colócalo con la parte doblada delante. Así es más fácil de coger. 

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Ojo con los complementos

Ellos solitos pueden cargarse el orden de tu armario. Resérvales un sitio en tus baldas y ten en cuenta sus medidas. Con huecos de 20 cm de alto es más que suficiente para guardarlos. Lo más práctico es que tengas en zonas accesibles los de temporada y los que no uses en este momento dentro de cajas en las baldas más altas. 

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Optimiza el espacio

Si colocas los bolsos de perfil te caben más en las baldas y los localizas a la primera. También puedes aprovechar el interior de los bolsos rígidos para guardar los modelos blandos . Si tienes muchos lo ideal sería guardarlos en un casillero. Los que más a menudo te pones que estén a mano. 

¿Eres de colgar o de doblar?

Es lo primero que debes tener claro para saber si tu armario se ajusta a la ropa que tienes y es de tu medida. Vacíalo y haz montones sobre la cama por tipo de prendas: las camisas con las camisas, los pantalones con los pantalones y así con todo. Una vez lo tengas todo agrupado verás si la ropa de colgar gana por goleada o si eres más de jerséis y camisetas. Con esta sencilla comprobación ya sabrás si eres más de barras o de baldas.

¿Dónde caben más?

Pues en general la ropa que va colgada ocupa menos y, además, se mantiene mejor que la ropa doblada. Además, los barras son el accesorio más barato de tu interior de armario (el más caro son los cajones). Así que si tienes más ropa de colgar apuesta por barras: son prácticas y económicas.

Las baldas, por su lado, son la mejor opción para prendas que no tiene sentido que guardes dentro de cajones, como los jerséis sobre todo si son gruesos. Ya sabes que nosotros somos fans del doblado vertical, siempre que se pueda, pero para lo "gordo" el método de Marie Kondo es más contraproducente que otra cosa. No tiene sentido "desperdiciar" un cajón con cuatro jerséis gruesos si te pueden caber 20 camisetas.

W00383642 Interior de armario, colgador para camisas

Ahora saca el metro

Si ya sabes lo que necesitas, ahora te toca componer el armario a tu medida. Si es modular y puedes cambiar la distancia de barras y baldas será casi casi como si lo hicieras a medida. Destina la zona de arriba del todo, de los 200 hasta el techo, a baldas para la ropa de otra temporada y como maletero. Ganarás espacio si, como con los bolsos, guardas una maleta dentro de otra.

En la parte central, es decir la más accesible, de los 100 a los 200 cm coloca lo que más usas. Calcula huecos de 100 cm para las camisas, de 110 para las chaquetas y de 170 cm para lo más largo. Y la zona inferior, de los 100 cm para abajo, destínala a cajoneras, zapateros...

No te olvides de la estética

Cajas, perchas, fundas... Si las eliges todos estos accesorios iguales tu armario sacará un 10 en la clase de estilismo. Las perchas iguales, además de bonitas, se adaptan mejor entre ellas para aprovechar el espacio. Si en cambio mezclas modelos de distintos colores y materiales tu armario transmitirá sensación de desorden.