1 /22

1.

Fíjate en las ventanas para elegir las cortinas del salón

003809861200x1372 b4b67994 1200x1372

Color, estampado, tipo de sujeción... Son aspectos importantes a la hora de elegir las cortinas de tu salón. Pero lo principal antes de decidirte es que te fijes en tus ventanas. No solo para acertar con las medidas de las cortinas, también para elegir el tipo de tela en función de la luz que reciben. Unas ventanas orientadas al norte tienen menos cantidad de luz que las que lo están al sur. Tenlo en cuenta. 

2.

Así puedes calcular las medidas perfectas

salon-con-cortinas-blancas-sujetadas-por-rieles-sobre-barra ab3fe3b1

Para calcular la cantidad de tejido necesario para las cortinas de tu salón debes multiplicar la medida del hueco a cubrir por 2 o 2,5 –e incluso por 3, en el caso de los visillos más finos–. También dependerá de si quieres un efecto más fruncido o más lineal. Esto por lo que respecta al ancho. 

3.

Las cortinas del salón deben arrastrar

Si quieres que las cortinas de tu salón resalten, que la tela se vea gustosa y el ambiente más elegante, sé generoso con el largo, como aquí. Lo ideal es que las cortinas se apoyen en el suelo. La tela debe medir, al menos, 35 cm más que la caída confeccionada de la cortina (para poder realizar la sujeción superior y el dobladillo). Y, si quieres que arrastren, añade otros 15 cm.

 Estas son de Tapisseria Teixidó.

4.

Busca un tejido resistente y fácil de lavar

detalle cortinas con mucha caida

A la hora de adquirir la tela para las cortinas debes fijarte que deje pasar la luz, por supuesto, pero también que en su composición tenga tratamiento antipilling, eso quiere decir que no hace bolas, y también ignífugo. 

5.

El lino es siempre una buena elección

El lino es un clásico entre las telas para cortinas por su buena caída y su aspecto natural debido a la desigualdad de sus hilos. Elígelo con mezcla, así se arrugará menos y podrás lavar las cortinas en casa sin que se encojan.

6.

Cortinas de seda en el salón

Su acabado brillante y sus reflejos crean ambientes románticos y sofisticados, sin embargo, la seda es delicada al sol directo. Para que las cortinas tengan mejor caída, fórralas con un poco de muletón.

7.

Otra opción son las cortinas de tul u organza

Las telas vaporosas –muselinas, voile, tul, organza...– y de trama abierta, como algodones y linos, filtran la luz –que llega agradablemente tamizada– y dejan entever las vistas, como aquí. Sofás realizados por Cusó Tapicers.

8.

Acierta con el color de las cortinas del salón

salon-comedor-con-cortinas-de-lino-beige-hasta-el-suelo eb3fd87d 2000x1678

Elige el color de las cortinas de tu salón teniendo en cuenta el resto de decoración. El tono que elijas para la pared, así como las telas de la tapicería, cojines o pantallas, te marcarán la gama predominante y el tono idóneo para las cortinas. Ya sabes las cortinas de colores neutros nunca fallan. 

9.

Las cortinas lisas son más ligeras y atemporales

salon-tonos-verdes-amplia-ventana-visillos-sofa-chimenea-cesta-fibra 402344 bc56a864

¿Cortinas lisas o estampadas? Ese es otro dilema que deberás dar respuesta en tu salón. Lo bueno de las cortinas lisas es que son atemporales y mucho más ligeras que las estampadas. En El Mueble nos gustan las cortinas claras, por supuesto, porque dejan pasar la luz. Si las eliges del mismo color que las paredes se funden con ellas y si son ligeramente más claras o más oscuras tendrán algo más de protagonismo. Ya sabes, cortinas y estores son una pareja perfecta. 

10.

Cortinas estampadas sí, pero mejor si son claras

00495107 1ca255e9 1200x1317

Optar por unas cortinas estampadas también puede quedar genial en tu salón. Los motivos florales son una buena elección si tienes un salón lo suficiente grande y con mucha luz como para que las cortinas no se 'coman' ni el espacio ni la claridad. Lo ideal es que optes por una tela tramada con base clara, como esta. Estas 15 cortinas estampadas son muy El Mueble

11.

A grandes ventanas, doble cortina

Es una opción muy cómoda, y a la vez muy decorativa, para regular la entrada de luz sin renunciar a la intimidad. Reserva la tela más ligera y vaporosa como base y complétalas con unas abrazaderas, como aquí, para un elegante efecto teatral.

12.

Cortina y estor otra gran elección en el salón

00444956-72e3fbbb-1333x2000 e03184ef 1333x2000

La combinación de cortina y estor en el salón es otra alternativa muy decorativa. Puedes dejar las cortinas hacia los lados y regular la entrada de luz con el estor durante el día y solo usar las cortinas por la noche. Elígelas del mismo tono y te quedará genial. 

13.

Reversibles y con abrazaderas, una apuesta clásica

Reforzarás sí o sí la estética clásica de tu salón. Reserva la tela estampada o más extremada para el reverso, así al recogerlas con la abrazadera, el contraste visual será mayor. Cortinas de Gastón y Daniela.

14.

Puedes personalizar las cortinas del salón

¿Cómo? Complétalas con un encabezado. Si eliges la misma tela, pero quieres acentuar su efecto, como aquí, remátalas con un ribete de otro color. Otra opción habitual es añadirle un faldón en la parte inferior. Si es de un tejido con más peso, dará más presencia a tus cortinas.

 Cortinas de Dominique Kieffer.

15.

Barras para colgar tus cortinas

cortinas-el-mueble-00455328 1492a496

Las barras son la opción más simple para colgar las cortinas que pueden moverse con anillas o trabillas. El otro sistema son los rieles. Si te decantas por barras puedes personalizar sus extremos con unos remates decorativos. Elígelos en consonancia con la decoración del salón. 

16.

Un sistema para colgar tus cortinas: las anillas

Si quieres darle protagonismo al sistema de sujeción de las cortinas de tu salón, opta por las anillas. Existen infinidad de diseños de barras, remates y anillas, por lo que bastará con cambiarlos para "estrenar" cortinas. 

Estas, de lino, de Ornatus.

17.

Con trabillas, tendrás un efecto informal

Son muy decorativas, ya que la cortinas se sujeta directamente a la barra, pero no se deslizan tan bien como con anillas. Un consejo: resérvalas para ventanas de tu salón que no tengas que abrir y cerrar con frecuencia. 

Estas son de Filocolore.

18.

Cortinas con ojales, solo sin son ligeras

Son una alternativa muy decorativa a las anillas, sin embargo conviene elegir unas telas ligeras, ya que si los cortinajes fueran muy pesados, con el uso la tela podría rasgarse.

19.

Los rieles son perfectos si las cortinas del salón pesan

Es el todoterreno de los sistemas de sujeción: discreto, cómodo e ideal para grandes cortinajes, ya que puedes manejarlos sin problemas. Estas cortinas son un diseño de la decoradora Pia Capdevila.

20.

Disimula las cortinas con una galería

Decora, oculta el mecanismo de sujección de las cortinas y "regala" altura visual, porque parece que las cortinas cuelgan del techo. Mejor, imposible. 

21.

Si quieres que tu salón parezca más alto

¿Quieres que el salón parezca más alto? Instala la barra de las cortinas pegada al techo. Y si eliges una tela a rayas verticales, como esta de Yute's, acenturás aún más el efecto.

22.

La cortinas también amplían las ventanas del salón

Llevar la barra de la cortina más allá de la ventana es un recurso para que las aberturas parezcan más grandes, como se ha hecho aquí. Cuando quedan abiertas a ambos lados el efecto visual es que las ventanas se han ensanchado. 

¿Quién no se ha enfrentado en algún momento a la paralizante indecisión de elegir las cortinas del salón? Que si la tela, que si la caída, que si el sistema de sujeción, que si que dejen pasar la luz (pero ¡ojo que los vecinos no nos vean!)... Y ahí es cuando a menudo desistimos y empezamos a pensar en las bondades de una ventana desnuda. Pero no, rendirse nunca es la solución.

Por eso en este artículo hemos reunido todos los consejos que necesitas escuchar para superar la indecisión y una completa galería en la que seguro que encontrarás buenas ideas para tu salón. ¡Y despídete de las ventanas indiscretas!

Acertar con la tela: ¿Qué estilo buscas para las cortinas de tu salón?

Antes de ojear muestrarios de telas, piensa qué quieres para tu salón. ¿Buscas una cortina sufrida, discreta e informal? ¿O prefieres una que sea protagonista de la decoración? En el primer caso, los tejidos naturales, como lino y algodón, son una apuesta segura por sus buenas prestaciones: tienen caída y si los eliges de trama abierta, darán un look más desenfadado. Además, dejan pasar la luz sin restar intimidad. Es recomendable elegirlos con mezcla para facilitar su mantenimiento, ya que, por ejemplo, el lino 100% se arruga mucho al lavarse.

En cambio, si buscas un efecto más sofisticado, la seda, con sus juegos de brillos, es una apuesta segura. Para mejorar su caída, lo ideal es forrarla con muletón. Además, con ello la proteges del sol directo, que podría llegar a "quemar" la tela y decolorarla. Se lleva en tonos naturales e incluso pasteles.

¿Lisas o estampadas? El eterno dilema

Los lisos nunca pasan de moda y es más difícil cansarte de una cortina de lino en un suave tostado que de una con grandes motivos florales. Sin embargo, no existe una fórmula para todos, dependerá de los gustos particulares de cada uno.

Lo que sí debes tener en cuenta es que las cortinas lisas son más ligeras visualmente y, en igualdad de tela, dejan pasar mejor y de manera más uniforme la luz que una estampada. Si aún así apuestas por los estampados, son tendencia los dibujos geométricos y los hilos metálicos sobre fondo blanco o claro. Valóralo.

Ni cortas ni largas. Calcula bien la medidas de las cortinas

En cuestión de largos tampoco existe una fórmula infalible. Lo más habitual es sumar unos 15 cm al largo de la ventana. Pero si te gusta que las cortinas arrastren y se apoyen holgadamente en el suelo, como a nosotros, entonces añade 10 cm más. Con ello, además, te garantizas que en caso de encogerse un poco tras el primer lavado, las cortinas no te quedan cortas.

Dos cortinas... ¿mejor que una?

Si tienes mucha luz en casa sin duda dos es mejor que una. Pero para que esta combinación de dos cortinas o una caída y estor sea práctica conviene elegir para la cortina de base (o si lo prefieres, estor) un tejido ligero y de tonos claros, que permita el paso de la luz. Y reservar para la cortina superior una tela más gruesa y tupida para que, al cerrarla, frene el paso de la luz y puedas disfrutar de intimidad.

El sistema de sujeción: cuestión de practicidad

Si tienes grandes cortinajes o cortinas muy pesadas, no lo dudes: con riel, es el sistema de sujeción más cómodo para abrir y cerrar las cortinas. Además, es muy discreto.

Si quieres ocultar el mecanismo, puedes hacerlo completándolo con una galería o una cornisa: parecerá que las cortinas cuelgan del techo. Las barras, por su parte, son muy fáciles de instalar y las hay de infinidad de materiales y acabados.

¿Cómo cuelgo las cortinas del salón a la barra?

  • Con anillas. Son la opción más cómoda, ya que se deslizan muy bien, sin importar el tipo de tela.
  • Con ojales. Las anillas están incorporadas a la cortina. El único "pero" es si eliges una tela pesada, ya que con el tiempo podría rasgarse.
  • Con trabillas. Son muy decorativas, ya que la cortina se ha rematado con una tira que es la que se desplaza por la barra. Dan un look informal, pero suele costar más correr la cortina.
  • Con lazos. Si buscas un aspecto delicado y un tanto romántico, aciertas seguro con esta opción. Pero, como en el caso de las trabillas, es mejor reservarla para cortinas decorativas, de poco uso.