Baldas y estantes en el baño: decorar con ellas y hacerlo con estilo pasa por seguir esta guía

La forma de integrar baldas y estantes en esta parte del baño es en el propio mueble de lavabo o en un lateral, en la pared. Aquí vemos un ejemplo de encimera con lavabos encastrados y repisa corrida en la parte baja. Para aprovechar este espacio, lo mejor es colocar cestas, bandejas y cajas en las que organizar los accesorios.

En este caso los estantes se ubican en un lateral del mueble del lavabo. De esta manera se pueden organizar utensilios y accesorios sin "llenar" la encimera. Aquí se ha realizado una composición a medida de estantes empotrados en la pared con un estante de madera sobre cada espacio, a juego con los acabados del mueble principal.

Otro ejemplo de un diseño de mueble, que puede realizarse de obra y revestido con azulejos, microcemento o similar o bien en un material como porcelánico o piedra. Su diseño en U invertida se completa con un estante de menor fondo en madera en la parte baja para organizar (si sucumbes al orden de Marie Kondo o a otro sistema, es cosa tuya).

En este caso, el mueble de lavabo en este baño se compone de dos baldas gruesas realizadas a medida en roble. Una de ellas actúa de encimera sobre la que apoyan los lavabos. La otra es un estante que completa el diseño y aporta almacenamiento. En este caso, el tipo de tablero conviene que sea hidrofugado.

¿Qué te parece esta idea? Este diseño de mueble de lavabo en el baño cuenta con una doble solución de almacenaje. Por un lado, los cajones corridos diseñados de lado a lado bajo la encimera con lavabos encastrados. Y, por otro, la zona de apoyo que se crea, como un estante, al separar el módulo de cajones de la encimera.

En este caso, el mueble de lavabo es un diseño a medida con varios estantes o compartimentos abiertos en los que se organizan las toallas vistas y otros elementos en cestas de fibra natural. Sorprende su diseño de cantos y esquinas redondeados.

Esta es otra solución que aprovecha baldas y estantes en la zona del lavabo. Se trata de un mueble adaptado para acoger el lavabo, que soluciona la zona de apoyo superior. Debajo, dos estantes para organizar toallas y demás objetos. Para ello, recurre a cajas y a neceseres de telas vistosas donde tener el maquillaje, el secador, las cremas…

Aquí, el mueble del lavabo está diseñado a medida en madera con gavetas en la zona de los lavabos (dos sobreencimera) y se prolonga en la pared con un espacio de estantes abiertos en los que se han colocado cajas de fibra natural. Esta idea es muy adecuada para aprovechar el espacio y para dar servicio, por ejemplo, a una zona de bañera exenta en el lado que coincide con los estantes.

Aquí se aprecia la idea que mencionábamos anteriormente. Un mueble de lavabo a medida que prolonga su diseño en la zona de la bañera exenta. Allí están los estantes que sirven para tener a mano las toallas. Otra repisa que aparece en este proyecto es la que se crea en la pared, entre el zócalo y la parte superior de la ventana. Allí se instala un listón de madera, haciendo de ese espacio un estante práctico para colocar botes.

Un banco puede cumplir varias funciones en el baño. En este caso, el banco bajo la encimera del lavabo aporta más almacenaje al usarse como estantes para organizar toallas y albornoces. Aquí también, el espacio que se crea alrededor de la bañera, todo revestido con piedra, es una zona de apoyo que se aprovecha con botes agrupados en bandejas.

Otro ejemplo en el que un banco para sentarse se usa como estantes para almacenar debajo de una encimera de una sola pieza con doble lavabo integrado.

En la zona del lavabo también es fácil incorporar estantes sobre el lavabo en sí. Muy cerca del espejo. Hay modelos de espejo que integran en el diseño un pequeño estante o balda de apoyo. Y siempre es posible incorporar uno justo debajo de la luna. Ese espacio es idóneo en baños pequeños donde no hay encimera junto o alrededor del lavabo.

La misma idea que acabamos de mencionar, pero con un modelo de balda exento que se atornilla en la pared y cuyo diseño tiene cierta inspiración retro. Se trata de un modelo en L invertida en material cerámico.

En este caso, la repisa o balda se crea con un altillo que apoya sobre la encimera del mueble del lavabo. De esta forma hay un doble nivel que permite organizar y decorar ese estante sin perder espacio de apoyo en la encimera. Quedará despejado mientras usas el secador o te maquillas.

Una estantería con baldas abiertas, realizadas en madera, en la pared lateral del lavabo. La encimera se aprovecha hasta el extremo puesto que esta pieza de almacenaje se instala a una distancia que facilita el uso y acceso de una persona de pie. Cuenta con trasera también en madera y en esta estantería se han cajeado los enchufes e instalado un aplique de luz.

Unas pequeñas baldas de cristal con soporte a pared salvan aquí los enchufes de la pared en uno de los laterales del mueble del lavabo. Es otra idea para incorporar estantes al baño, sin recurrir a soluciones a medida. Con ellas ganarás espacio de organización.

Una estantería es lo que se ha diseñado en este baño para ganar espacio de almacenaje y un espacio en el que integrar el cubo para la ropa sucia pendiente de colada. Se crea un mueble a medida, de obra, junto al lavabo. Su diseño de suelo a techo y de gran fondo aporta mucha capacidad para guardar y almacenar.

Otro diseño a medida que se adapta al espacio. Esta solución integra elementos arquitectónicos que no se pueden tocar, como una bajante o un tiro de chimenea. En el espacio que es posible ganar centímetros se diseñan los estantes, adaptando el diseño también a la inclinación del techo. Todo revestido en microcemento.

En este caso, el hueco que queda entre el pilar y el armario se ha aprovechado con estantes de madera a medida colocados a la misma distancia uno de otros. Es una solución que da continuidad al armario de la pared, de manera estética, pero con la comodidad de permitir el almacenaje abierto, que quede de acceso cómodo ya desde la zona del lavabo en el baño.

También es práctico colocar un estante de fondo reducido, específico para un uso decorativo como puede ser colocar un espejo o varios cuadros enmarcado. Es el uso que tiene esta balda en este baño.

Un banco de obra es una zona de apoyo en la ducha. No solo sirve para sentarse mientras se usa la ducha, también para secarse y aplicarse cremas y, al mismo, tiempo, es un lugar de apoyo para los botes. Evitarás agacharte a por ellos.

Otra idea para crear un estante en la zona de la ducha que sirva para apoyar los botes de uso es esta: una repisa creada en un retranqueo de la pared.

Cuando no es posible crear ninguna hornacina ni ganar una repisa de apoyo en un retranqueo en la zona de la ducha, lo mejor es ubicar un estante exento para colocar los botes y evitar dejarlos en el suelo. Los materiales han de ser adecuados para estar en contacto con el agua y su fondo reducido para que no entorpezca en los movimientos dentro de la zona de la ducha.

Otro tipo de estante que soluciona la organización y almacenamiento en la ducha. Se trata de una hornacina o estante empotrado en la pared de forma cuadrada o rectangular. Bastan 25 cm para que sea útil. Si tienes un fondo mayor, más capacidad de almacenaje. Se suele revestir en el mismo material que el resto de la pared, que soporte el contacto con el agua.

Cuando se instala en el baño un inodoro de cisterna empotrada también se crea una repisa en la pared. Son los centímetros que ocupa la cisterna y esa zona es un estante que se puede usar para decorar o como espacio para organizar botes, rollos de papel… Aquí se deja el espacio despejado sobre ese desnivel, pero es posible instalar baldas a medida ahí. El espacio que queda alrededor del inodoro ¡se aprovecha!

Aquí, por ejemplo, ese hueco que se crea sobre la cisterna empotrada en la zona del inodoro se convierte en una hornacina en la pared. Para aprovechar la altura se instalan varios estantes.

Otra solución para organizar botes en la zona de ducha o bañera es esta: un original estante tipo cesta con distintas capacidades y ganchos en los que colgar cepillos y esponjas.

Aquí la ducha y la bañera exenta comparten espacio. Para organizar botes y crear un punto de decoración que se ve desde la entrada al baño, se diseña una hornacina rectangular de lado a lado de la pared, la misma en la que se instala la grifería mural de la bañera.

En este baño, en la zona de la bañera exenta, se combinan dos baldas de distinta longitud, una sobre otra, pero en dos acabados. La inferior es un estante corrido realizado a medida en el mismo material de microcemento que reviste la pared. La superior es más corta y contrasta en madera, aportando calidez. La balda inferior sirve para colocar los botes a los que se accede cómodamente desde la bañera, aún estando sentado.

En este baño se crea una hornacina revestida en azulejos justo sobre la bañera encastrada. Se integra en el conjunto de la composición del mueble del lavabo, prolongando la encimera sobre ese estante abierto.