Las mejores plantas para el dormitorio: son bonitas, purifican el aire y te ayudan a dormir mejor

Una de las mejores plantas para el dormitorio es la hiedra. ¿Por qué? Mejora los síntomas del asma y las alergias y reduce la presencia de moho y contaminantes. No le gusta ni la luz directa, ni el fri´o, ni tampoco que la riegues en exceso (ya que puede amarillear sus hojas). Un truco para cuidarla es pulverizarla unas tres veces a la semana.

También conocido como Nephrolepis exaltata o helecho espada, es una opción perfecta para lucir en dormitorios muy luminosos. ¿Lo mejor? Es una planta medicinal: alivia la congestión de las vías respiratorias y la tos. La sequi´a es su peor enemiga, así que atenta a sus hojas. Un truco: vaporízalas con agua y, si las pierde, corta a ras para que rebrote.

La sansevieria (o lengua de tigre o de suegra) es una planta muy resistente y fácil de cuidar. Elimina agentes tóxicos, purifica el aire del dormitorio y transforma el dióxido de carbono en oxígeno mientras duermes tan plácidamente. No le gusta la luz directa y necesita poquita agua, por lo que debes evitar encharcarla. Ah, y no se recomienda pulverizar sus hojas. 

También conocida como malamadre, lazo de amor o araña. La cinta (Chlorophytum comosum) es una de las plantas para el dormitorio más recomendadas porque favorece el sueño, elimina el 90% del formaldehído presente en el aire, absorbe olores y ayuda a mantener alto el nivel de oxígeno. Le gusta la humedad, así que mima sus hojas de vez en cuando.

Vamos con una opción muy decorativa. Se conoce como hypoestes u hoja de sangre y le encantan los espacios luminosos. Es tan original que queda genial en cualquier dormitorio. Fíjate bien en sus hojas, porque si pierden color, ¡están suplicándote más luz!

Las orquídeas o phalaenopsis son ideales porque le darán un toque de elegancia infalible a tu dormitorio. Esta planta de interior es muy fa´cil de cuidar, florece una vez al año (durante los meses con las temperaturas más bajas) y no necesita luz directa. Colócala en tu mesilla y, sobre todo, evitar encharcar sus raíces. ¡Qué elegante!

La gynura (o planta de terciopelo) es otra planta muy muy decorativa que no pasará desapercibida en tu dormitorio. Necesita un buen drenaje para evitar la aparición de hongos. Y, si quieres potenciar sus tonos púrpuras, colócala más cerca de la luz natural. Por cierto, si sus flores no huelen bien, debes eliminarlas.

Las suculentas son perfectas para decorar cualquier rincón de relax. Sus diferentes formas y diseños nos permiten hacer creaciones muy originales y su tamaño las hace perfectas para el dormitorio. ¿Lo mejor? Oxigenan el ambiente y no necesitan mucha agua ni luz solar.

La fragancia de la lavanda (Lavandula angustifolia) nos ayuda a dormir mejor. Es una planta aromática ideal para combatir el estrés, relajarse y calmar la ansiedad. Sus pequeñas flores moradas son muy decorativas y puedes colocarla sobre la cómoda o cerca de la ventana, ya que le encanta el sol. Para tenerla en maceta, necesitas una de barro o terracota, de unos 30-40 cm y con agujeros que mejoren el drenaje. Riégala cuando la tierra esté seca y evita encharcarla.

El jazmín (Jasminum officinale) es una planta con unas preciosas flores y un aroma exquisito que mejora el estado de ánimo, ayuda a reducir la ansiedad, reduce los niveles de tensión e incluso ¡los sofocos! Y en verano, se transforma en una planta antimosquitos. Además, dará un toque muy sofisticado a tu dormitorio. Solo necesita sol directo y estar en un lugar alejado de fuentes de calor y frío (como la calefacción) y corrientes de aire. Riégala poco, pero a menudo y siempre evitando encharcamientos.

El espatifilo (Spathiphyllum) conocida también como Flor de la paz, es una planta ideal para dormitorios oscuros o con poca luz. Sus hojas tienen un color verde vibrante y florece con luz indirecta. Por lo que, además de purificar el aire, queda muy decorativa. Le gusta la humedad, así que debes regarla de manera regular (¡pero sin pasarte!).

Los lirios de agua (o calas) llenarán de color tu dormitorio. Puedes elegir el color de sus flores (blancas, amarillas, rojas...) que mejor encaje con tu estilo decorativo aunque, ya te adelantamos, que conseguir que florezca es algo complicado. Ubícala en un lugar luminoso, pero sin sol directo. Riégala constantemente, sin encharcamientos y aumentando la frecuencia durante la floración. Y, cuando sus flores se marchiten, córtalas para revivir la planta. 

El árbol del dinero se ha convertido en una planta interior muy popular y querida por los entusiastas del feng shui ya que es considerada símbolo de prosperidad y buena suerte. Además, requiere poco mantenimiento y se dice que aporta energía a cualquier espacio y ayuda a reducir el estrés, por lo que es muy conveniente tener un ejemplar en el dormitorio para asegurarnos un buen descanso nocturno.

Otra planta de interior que prospera muy bien con pocos cuidados es la aglaonema (también conocida como "siempreviva china"). La aglaonema es capaz de sobrevivir en condiciones de poca luz. Además, su apariencia es bastante curiosa porque, dependiendo de la variedad que elijas, sus hojas alargadas pueden tener toques de rojo o plateado. Eso sí, necesita tener su tierra húmeda, así que acuérdate de rociarla con agua regularmente.

El anturio es considerada como la planta de interior que cuenta con la floración más duradera del mundo. Y es que sus vibrantes flores rojas pueden durar hasta 8 semanas y, además, constantemente le van apareciendo nuevas. Para ayudarla a prosperar tan bien, necesita que la coloques en un lugar con luz brillante y alta humedad. Como regla general, riégala una vez a la semana dejando que la tierra se seque entre riegos.

El aloe vera, aunque es más bien conocido por ser un ingrediente calmante que se encuentra habitualmente en lociones y jabones, también se trata de una excelente planta de interior. Más concretamente, es una suculenta tropical, con hojas carnosas y bordes puntiagudos, no necesita riegos frecuentes, pero sí requiere mucha luz, así que una buena opción es colocarla en el alféizar de la ventana de tu dormitorio.

Con hojas verdes exuberantes y preciosas rayas blancas, el filodendro birkin es una planta de rápido crecimiento y, a su vez, una de las más fáciles de mantener en buen estado. Colócala en un lugar con luz media a indirecta y riégala una vez a la semana o cada dos semanas. Ponla en una maceta bonita y será la planta perfecta para tener junto a la cama.

Si tienes ganas de añadir una planta a tu dormitorio para disfrutar de todos sus beneficios pero te da miedo no saber cuidarla bien, el ficus elástica es para ti. Es una planta de interior muy resistente y sus hojas oscuras y brillantes aportarán un toque de dramatismo a cualquier dormitorio pequeño.

Aunque prefieren la luz brillante, especialmente la filtrada por la mañana, también pueden tolerar condiciones de luz más baja. Riégala cuando la tierra esté ligeramente seca al tacto, aproximadamente una vez a la semana.

Con su follaje llamativo y sus detalladas marcas, la drácena es una planta purificadora de aire ideal para dormitorios grandes. Y decimos que es ideal para dormitorios grandes porque, con el tiempo, puede alcanzar una altura de hasta un metro, así que asegúrate de que tenga suficiente espacio para crecer.

Las drácenas prefieren luz moderada y suelo ligeramente húmedo, por lo que lo ideal es colocarla cerca de una ventana para que crezca en óptimas condiciones.

Las hojas con detalles intrincados de esta planta decorativa para interiores la hacen destacar al instante. Lo mejor de todo es que la diefembaquia no requiere muchos cuidados regulares, siempre que tenga luz moderada y riegos frecuentes. Solo ten cuidado de mantener la tierra húmeda, pero no empapada o encharcada.

Una de las mejores plantas para el feng shui es el bambú de la suerte ya que se dice que atrae energía positiva y buena fortuna al hogar. Es bastante resistente y prefiere luz moderada, aunque se adapta bien a condiciones de poca luz.

Si cultivas tu bambú de la suerte en tierra, intenta que esté siempre ligeramente húmedo. Si, por el contrario, lo tienes en agua, asegúrate de que las raíces estén siempre cubiertas y cámbiala cada semana aproximadamente.

Seguro que ya tienes tus favoritas... ¿Te animas a dar un toque de verde con ellas? La verdad es que las plantas para dormitorios decoran por si solas. Y si no te lo crees, mira estos ejemplos. 

Pon las plantas de menor envergadura con cubremacetas de latón, zinc o cerámica. Un consejo: evita las de hojas puntiagudas.

Que sería de nuestro dormitorio sin una cómoda. Este mueble es realmente perfecto para colocar las plantas. Nuestro consejo: sitúa un conjunto de pileas o una orquídea, que aportará un toque súper romántico.

Suma vida con palmeras, monsteras o pequeños arbolitos. Los kokedamas quedan genial con sus envolturas de musgo y añaden sensación de frescor.

Si tienes una planta muy especial, ¡que luzca sobre un taburete! Y, si es muy grande, colócala al lado de una butaca o una silla.