Aunque las macetas de terracota, con su belleza rústica, son muy comunes en el mundo de la jardinería, no siempre son la mejor opción para todas las variedades de plantas. Y es que estas macetas, fabricadas con arcilla porosa, permiten que el agua y el aire circulen libremente a través de sus paredes, lo que ocasiona que el suelo se seque rápido, especialmente en climas cálidos o secos.
Este proceso de evaporación, mientras sí es adecuado para plantas que requieren un buen drenaje, no lo es tanto para aquellas que necesitan un entorno más húmedo para crecer y mantenerse en buen estado. De hecho, les podría hacer sufrir estrés hídrico, debilitar su estructura o pudrir sus raíces. Para que puedas mantener la salud de tus plantas intacta, te contamos, a continuación, 4 plantas que nunca deberías cultivar en macetas de terracota.
4 plantas no aptas para macetas de terracota
Para que estas 4 plantas puedan crecer en un ambiente saludable, en lugar de cultivarlas en macetas de terracota, debes hacerlo en macetas de cerámica o plástico ya que retienen mejor la humedad y reducen la necesidad de riego.
1. Helechos
Los helechos son un grupo de plantas sin flores que pertenecen a la familia Pteridophyta.
Sus hojas, conocidas como frondas, son de aspecto elegante y plumoso, de ahí que se utilicen tanto en decoración de interiores. Para prosperar, los helechos necesitan estar en ambientes húmedos y con sombra, por eso, es tan importante ofrecerles un sustrato que retenga la humedad de manera constante.
2. Venus atrapamoscas
La venus atrapamoscas, conocida científicamente como Dionaea Muscipula, es una planta carnívora que se caracteriza por sus hojas en forma de trampas que se abren y cierran rápidamente, lo que les otorga la genuina capacidad de atrapar insectos y otros pequeños invertebrados. Al igual que los helechos, la venus atrapamoscas necesita de suelos húmedos y pobres en nutrientes, de ahí que no les venga bien las macetas de terracota.
3. Lirios de la paz
Los lirios de paz o espatifilos (Spathiphyllum), son plantas muy usadas en interiores debido a su elegancia, resistencia y capacidad para purificar el aire. Se caracterizan por sus brillantes hojas verdes y sus flores blancas, aunque, en realidad, son una especie de espata que rodea un espádice central. Al ser unas plantas originarias de las selvas tropicales de América Central y del Sur, necesitan de un entorno con sombra y humedad moderada para crecer. Por eso, nunca los tengas en macetas de terracota.
4. Árboles de hoja perenne
Muchas especies de árboles de hoja perenne son en miniaturas, como el olivo, el bonsái de pino o el ciprés enano, para que podamos usarlos en la decoración de casa. Lo mejor de estos árboles de hoja perenne es que te permiten disfrutar de su verde todo el año. Para conseguirlo, es necesario cultivarlos en la maceta adecuada para sus necesidades y la terracota no es buena opción si planeas tenerlos al aire libre durante el invierno ya que no soporta las heladas y podrían agrietarse.