Adiós a las molestas averías en casa si revisas todo esto antes de que llegue el invierno. ¡Y ahorrarás!

Hace meses que no pones la calefacción y la caldera y los radiadores pueden no estar en buen estado en el momento en que necesites usarla. A continuación te vamos a enumerar los posibles problemas con los que te puedes encontrar en tu casa con la llegada del frío y que puedes evitar.

La caldera sin 'sustos' todo el año

Es fundamental que la caldera funcione bien: por seguridad, confort y ahorro. El técnico revisará que los conductos son estancos, que la habitación está bien ventilada y que los gases se evacuan perfectamente.

• La revisión debe hacerse obligatoriamente cada 2 años (en el País Vasco, cada año). Las compañías suelen ofrecer una anual por una cuota fija (por ejemplo, Endesa 5,78 €/mes).
• Límpiala cada 2 meses. Retira la carcasa y pasa el aspirador. Quita la grasa con un cepillo de dientes y agua caliente.

Atenta a un posible escape de gas

Las instalaciones de gas natural deben pasar una inspección obligatoria (IRI) cada 5 años. Tu distribuidora te mandará un aviso por carta; si quieres que sea otra empresa o técnico quien la realice, tendrás que indicárselo en los 3 meses siguientes.

• ¿Qué incluye la inspección? El técnico revisará los elementos de la instalación que están entre la conexión al contador y los aparatos que funcionan con gas.
• Cuánto cuesta. El precio depende de cada comunidad autónoma. Incluyendo gastos de gestión suele costar entre 41,5 € y 58,1 €.

¿Te toca la revisión? Ojo con los timos

• Tienen que avisarte antes. Cada 5 años enviarán una carta para la IRI. La cita para revisar la caldera (cada 1/2 años) se concierta por teléfono.
• Durante la visita, no des datos bancarios ni abones nada en efectivo. Los costes se incluyen en la cuota o pasan por el banco. Cuando termine, el técnico te pedirá que firmes un certificado y te entregará una copia.

Vigila estas averías y ahorrarás en la factura de la luz.

Adiós a las fugas de agua

Suelen aparecer en los latiguillos, las juntas y los grifos. Vigílalos de cerca.

• Si un grifo gotea por la base, sustituye la junta de goma. Desmonta el grifo, quita la junta, compra una igual y ponla. ¿El latiguillo pierde? Quítalo y cámbialo por uno nuevo (desde 3,64 €, manomano.es). También puedes contratar un plan de reparaciones de fontanería de urgencia desde 4,51 €/mes (homeserve.es).
• Impide que se congelen las tuberías exteriores; pueden reventar. Fórralas con coquillas aislantes de espuma y no tendrás problemas (desde 0,48 €/mes en Leroy Merlin).

¿Hay bomba de calor?

Por normativa del RITE es obligatorio que un técnico revise una vez al año los aparatos con más de 70 kW de potencia. Limpia los filtros de la unidad interior antes de ponerla en marcha. Lava con agua y jabón y deja secar. Limpia la exterior con agua y detergente. Para eliminar la humedad de los conductos, ponlo en modo "ventilador" durante 4-6 horas.

Haz que tus radiadores calienten a tope

Cuando no se usan, suelen perder eficacia y algunas partes se deterioran. Arréglalo.

• Qué hacer antes del invierno. Si tienes calefacción por caldera, purga todos los radiadores. Enciende la calefacción y abre el tornillo de purgado. Coloca debajo un vaso; cuando fluya el agua, ciérralo.
• ¿Son eléctricos? Verifica que los cables y los enchufes están bien. Si están pelados o con zonas negras (quemadas), cámbialos. Vigila la primera factura: si es muy elevada, tendrás que cambiarlos. Te ayudamos a elegir radiadores y ahorrar en la factura.

Cuando no se usan, los radiadores suelen perder eficacia y algunas partes se deterioran. ¡Vigila!

A salvo de cortocircuitos

Aunque no es obligatorio, conviene revisar periódicamente la instalación eléctrica. Si tiene más de 30 años, las luces parpadean, consume mucho o los enchufes e interruptores sueltan chispas, habrá que renovar la instalación eléctrica. Según habitissimo.com, el coste de una revisión está entre 80 y 400 € (según el tamaño de la vivienda).

Si al encender la luz notas olor desagradable, sustituye los cables: se están quemando.

Electrodomésticos: así no se te estropearán

• Nevera. Nunca la tumbes más de 40 grados ni cuando la transportes. Una vez al mes, apágala (sin desenchufarla) y límpiala con agua y jabón.
• Vitrocerámica. Intenta limpiar las manchas y la grasa antes de que se sequen. Usa limpiadores específicos y productos o estropajos no abrasivos.
• Horno. Si calienta poco, cambia las juntas de la puerta: se desgastan. ¿No cierra bien? Revisa las bisagras y ajústalas.
• Lavadora. Hay que limpiarla de forma regular. ¿Cómo? Vierte 1 tapón de bicarbonato en el tambor y pon un programa corto. Aumentará su vida útil.
• Lavavajillas. Una vez al mes, ajústalo a la temperatura máxima y en un programa largo. Vierte vinagre blanco en el cajetín del jabón y ponlo en marcha.

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