Recoges un día toda la casa, pero a los dos o tres días vuelve a estar todo "patas arriba". Esto es algo muy común que pasa si no tenemos el hábito de ordenar. El orden y la limpieza en casa es sumamente importante para sentirnos a gusto. Si crees que necesitas cambiar y, sobre todo, quieres hacerlo, debes saber que es posible, pero es un proceso lento que requiere de implicación. ¿Sabes cuál es el secreto?
Para responder a esta pregunta contamos con la opinión de dos gurús del orden como María Zamora de Kora Kora y María Gallay de Organización del Orden. Ambas coinciden en que sí es posible cambiar y ser más ordenados. Además, ahora que tenemos que adaptarnos a la "nueva normalidad", el ritmo de vida se ha vuelto a acelerar poco a poco. Y, de hecho, familias que ahora teletrabajan, han visto más desorden que nunca en casa. Pero, ¿hay remedio? ¿es posible cambiar a una vida mucho más organizada?
¿Cómo podemos saber si somos o no ordenadas?
Para conocer si realmente llevamos un orden en casa, María Gallay nos propone primero detectar nuestros puntos débiles contestando a estas preguntas:
- ¿Compro demasiado y/o acepto todo lo que los demás no quieren?
- ¿No reviso lo que tengo? ¿Solo guardo cosas?
- ¿Creo que todo lo que tengo es imprescindible?
- ¿Estoy más apegado a mis cosas que a mi familia/amigos?
- ¿Tengo conflictos con mi pareja/compañeros a causa de mis cosas?
- ¿Invado el espacio del otro porque no puedo prescindir de nada?
- ¿Pierdo tiempo buscando algo y tengo que comprarlo nuevo cuando sé que está en casa?
- ¿Guardo de todo “por si acaso”?
"Si respondes SÍ a alguna o varias de las preguntas, es que hay algo que no está funcionando", comenta María Gallay.
Entonces, ¿por dónde empiezo para ser más ordenada?
"Lo primero es el autoconocimiento y luego un trabajo de organización general de nuestra vida", comenta María Zamora. Cada uno "debe ser consciente de su desorden y cómo le afecta emocionalmente, y lo segundo, querer mejorarlo. Sin estos dos pasos previos, no habrá transformación", asegura la creadora del método KoraKora.
Da igual que seamos principiantes en el orden. Ambas gurús coinciden en que al final, lo importante es detectar "la raíz del problema" y, por supuesto, en reconocer que hay cosas que no nos hacen falta en casa y debemos cambiar.
"Todos tenemos más de lo que necesitamos, traemos mucho más de lo que sacamos y no optimizamos para almacenar", afirma María Gallay. Si nunca has hecho limpieza de armario o incluso aún no has tirado/donado ropa, es que hay un problema de desorden.
¿Cuánto tiempo se necesita para tener más orden en casa?
Ambas gurús confiesan que para conseguir cambiar hábitos se debe hacer al menos un mínimo de 21 días. Luego, la organización y el orden se hará con naturalidad. Aunque María Gallay asegura que es cierto, que esto suele pasar, pero con matices.
"En estos años, he tenido clientes que han arrastrado muchas cosas por años, creyendo que no podían vivir sin ellas. O que se resignaron creyendo que eran desordenados y estaban destinados a vivir así. Y empiezan a ser ordenados cuando terminamos con el trabajo en su casa. Al día siguiente, llaman para decir que no pensaban que se podían vestir en 5 minutos".
Eso sí, cuando el orden llega definitivamente se nota, y así lo ve María Gallay en algunas casas. "Cuando vuelvo para hacer con ellos el cambio de temporada, me cuentan que –con menos cosas y mejor organizadas– es posible mantener un orden y apetece hacerlo, no es una obligación, ¡es fácil!".
¿Cuál es la 'regla de oro' para no volver a caer en el desorden?
Quitar los malos hábitos cuesta, ¡y mucho! Al final, "se necesita un compromiso importante por parte de la persona", asegura María Zamora. Para María Gallay, hay algo claro si no se quiere caer en el desorden de nuevo, y es "tratar de no comprar por impulso ni aceptar cosas que quieran darte amigos o familiares. Aprender a decir no, tanto a ti mismo como a los demás, es el primer paso para recuperar el control sobre las cosas".
Otro regla fundamental a la hora de ser más ordenadas en casa es que motivemos al resto de integrantes. Si estos no son ordenados, "trata de hablar con la otra persona y propón un acuerdo", comenta María Gallay.
Para mejorar la convivencia y el orden se debe trabajar en conjunto. "Es como si en una orquesta cada uno tocara una melodía diferente, a destiempo, sin orden... En casa, al final somos como una orquesta, y cada integrante debe tocar la misma melodía aunque cada uno use un instrumento", aconseja María Zamora.