Entre las razas de perros molosoides, el mastín inglés destaca por sus múltiples cualidades, no solo como perro guardián y protector de los rebaños de ovejas, sino también como animal de compañía para las familias. Estos perros grandes que provienen de Inglaterra, imponen un gran respeto debido a sus dimensiones, sin embargo, no son nada agresivos. Al contrario, son perros muy calmados y pacientes, además, tienen un carácter de lo más afectuoso, rasgo que comparten con el mastín del Pirineo, el mastín español, el mastín tibetano, el mastín italiano y el mastín napolitano.
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Características del mastín inglés
Los mastines ingleses son perros grandes y robustos, con un cuerpo musculoso y ancho, y patas fuertes. Su cabeza es ancha y proporcionalmente más grande que el cuerpo, aunque el hocico es corto y cuadrado, con la trufa negra y los ojos pequeños y oscuros. Las orejas son también pequeñas y caen a ambos lados de la cabeza. El pelo es corto, denso y áspero.
Origen
El origen del mastín inglés se remonta a la antigua Roma, aunque su desarrollo tuvo lugar en Inglaterra. Los romanos llevaron perros de tipo mastín a Gran Bretaña durante su ocupación de la isla, y estos perros se cruzaron con las razas locales para dar lugar a lo que hoy conocemos como mastín inglés. Desde entonces, la raza se empleó para cuidar del ganado y proteger las granjas, fincas y terrenos, tareas que sigue cumpliendo en la actualidad.
Peso
- Machos: 73-100 kilos.
- Hembras: 54-77 kilos.
Esperanza de vida
Entre 10 y 12 años.
Colores
Albaricoque, atigrado y leonado.
Nombre científico
Canis lupus familiaris.
Altura
Machos y hembras miden entre 70 y 91 cm.
Carácter del mastín inglés
A pesar de su imponente apariencia y su carácter digno, el mastín inglés es un perro muy cariñoso y calmado que demuestra un gran afecto hacia su familia. Y es que es un perro con buena naturaleza. Por otro lado, el mastín inglés tiene un instinto protector muy arraigado. Es leal y valiente cuando se trata de cuidar a los suyos, por eso muchas personas lo utilizan para cuidar sus casas. En definitiva, se trata de una raza paciente y nada agresiva, y, por lo tanto, es ideal como perro de compañía para los niños y las personas mayores.
Importante: como siempre indicamos, la socialización y un buen adiestramiento desde cachorro son claves para que, tanto el mastín inglés como cualquier otra raza de perro, desarrollen todas sus cualidades y puedan convivir sin problemas con las personas e incluso con otras mascotas.
Cuidados del mastín inglés
Aseo
Al tener el pelo corto y áspero, bastará con cepillárselo una vez a la semana, y bañarlo cada mes y medio aproximadamente. Mantener limpio su hocico también es esencial, dado que esta raza tiende a segregar mucha baba.
Ejercicio
El mastín inglés requiere ejercicio diario de al menos una hora para mantenerse en forma, ya que puede volverse algo sedentario. Durante la etapa de cachorro, es importante evitar el exceso de actividad, porque los ejemplares de esta raza son propensos a desarrollar problemas óseos que podrían resultar en esguinces o desgarros durante su crecimiento. Por otro lado, al ser un perro de gran tamaño, el mastín inglés necesita suficiente espacio para moverse y corretear a su antojo, por eso es más recomendable para casas con jardín.
Cuánto cuesta un mastín inglés
Un cachorro de mastín inglés puede costar unos 1.200 euros en España, pero si te gusta la raza, ¡anímate a adoptar! Le darás una nueva oportunidad de disfrutar la vida que realmente se merece, y contribuirás a reducir los terribles abandonos de perros. Solo tienes que ponerte manos a la obra y buscar en todas las protectoras de animales que tengas a tu alcance.
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