Aunque en el recibidor los textiles no suelen ser los protagonistas, puede que nos apetezca poner una alfombra. Según la estilista, Dafne Vijande, si nos decidimos a poner una, lo ideal es optar por una "alfombra grande que ocupe casi todo el espacio para que sea un recibidor acogedor y, si las paredes tienen un estampado exagerado, que la alfombra sea de estilo sencillo para compensar".