Tanto si contamos con un salón pequeño como grande, los pufs y las mesas auxiliares nos ayudarán a tener asientos y espacio extra. Lo ideal, según Olga Gil-Vernet, es apostar por uno de 40x40 cm, de lino, loneta, ratán o fieltro. La ventaja de los pufs, tal y como nos confirma Solange Van Dorssen es que incluso se pueden apilar o guardar mientras no se usan.