14 reglas de oro (según los expertos) que no debes saltarte en una cocina pequeña

La mejor distribución de un espacio es la que se adapta a él. Solo así se aprovecha cada centímetro. Por eso los muebles a medida o que ofrecen posibilidades de adaptación lograrán que no se pierda nada. En una cocina pequeña la mejor distribución es la lineal, en L o en paralelo. Todo dependerá de si quieres un espacio de office con mesa o barra -en caso de que se pueda- o más mobiliario. ¡O ambas opciones! Ahora veremos cómo.

Porque abrir la cocina logra darle mayor sensación de amplitud. ¿Necesitas derribar un tabique entero o solo una parte? Porque contar con pared en la cocina te puede ayudar a apoyar allí muebles. Así que piensa si va bien mantener un tabique bajo con cristal encima o sin él o delimitar sin tabique, pero con mobiliario que puede -como aquí- convertirse en barra.

En una cocina pequeña, una de las reglas de oro es que todo sume. Y cuando se trata de personalizar, es posible incorporar algún mueble especial que dé carácter al espacio, pero que tenga una función. Así que no descartes plateros, alacenas o módulos altos de diseño único, que te permitan guardar y guardar.

Nos referimos a incorporar soluciones de orden y almacenaje en la pared de la zona de trabajo de una cocina pequeña. Es útil porque suma y perfecto para tener a mano utensilios de uso diario. Una barra con ganchos, estantes y botes, que te darán mucho juego.

Si hay espacio para incorporar una zona de comedor en la cocina, esta podrá resolverse con una mesa alta con taburetes, una mesa redonda con sillas o una barra anexa a la pared o a algún mueble. Una buena idea es arrimar una mesa rectangular todo lo posible a la pared y contar con un banco y taburetes bajos en lugar de sillas, para que resulte más ligera la composición. Tal y como ves aquí.

Acabamos de ver que una opción para crear un rincón para comer en una cocina pequeña es una mesa redonda. Esta puede quedar en un rincón, en el espacio central de la cocina (ya que la forma redonda permite el paso cómodo alrededor) o en un espacio que separa cocina de salón.

En la cocina hay que sumar organizadores y cajas a cajones y armarios para mantener el orden. Pero también porque es la mejor manera de aprovechar bien el espacio. La organización es clave para sacar partido a los centímetros y asegurar un uso cómodo.

¿Y por qué es útil esta idea en una cocina pequeña? Porque una grifería abatible, por ejemplo, te permite ubicar la zona del fregadero delante de una ventana, aunque esta sea batiente. Porque si se trata de una grifería con opción de agua caliente te evitarás tener un hervidor para las infusiones. Y porque hay griferías que aportan comodidad como las que se accionan sin necesidad de mandos, solo por sensores.

Cuanta mayor sea la unidad estética, más armoniosa y espaciosa se sentirá una cocina pequeña. Por eso es buena opción optar por sencillos frentes de diseño sencillo con tiradores integrados (o que sobresalgan poco -para evitar golpes-). Y aquí es importante integrar los electrodomésticos para que no haya cortes visuales (frigorífico, lavavajillas y lavadora, mejor integrados).

Las cocinas pequeñas resultan ligeras si no se saturan de muebles, aunque tampoco se pueden diseñar sin apenas espacio para guardar. Por eso hay que pensar en muebles en columna y en módulos altos para ganar capacidad de almacenaje. Para que no saturen, conviene equilibrar con alguna pared más despejada o parte de ella o bien abriendo algún hueco en una pared de columnas (con esta idea también se gana espacio adicional de encimera).

Una de las reglas de oro que conviene saber es que hay placas de cocción especiales. En cuanto a medidas, para que puedas llevar la que más conviene a una cocina pequeña y por ejemplo, optar por una placa mini que deje espacio de encimera o de fondo especial. Además, las hay con sistema de extracción integrado que evita que tengas que instalar campana y, por tanto, puedas ganar un mueble más.

Y también hay otros electrodomésticos especiales para cocinas pequeñas sobre los que ponemos la mirada. Por un lado, el lavavajillas (los hay de ancho reducido y de los que se instalan en altura). Y, por otro, existen hornos que tienen la función de microondas para que en un mismo aparato tengas más de una función resuelta.

Evitar los tonos oscuros para decorar una cocina pequeña también es una de esas reglas de oro que merece la pena recordar. Los colores claros aportan más luminosidad y, por tanto, más sensación de espacio. Pero si quieres color, puedes recurrir a los tonos medios y mejor, llevarlos a la parte inferior del diseño y reservar los más claros para los elementos que quedan a la altura de la vista.

Y, por último, solo recordar que se puede amueblar una cocina pequeña con mobiliario más actual o clásico. Aunque los frentes lisos y los diseños sencillos son ligeros visualmente, no hay motivo para renunciar a una cocina de estilo clásico siempre que se adapte el diseño.

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