Techos altos, molduras de inspiración modernista y baldosas de colores, esos rasgos tan de Barcelona volvieron a conquistar a Sandra, Marc y el pequeño Levi en su regreso a la ciudad condal. Esta familia ha vuelto a construir su hogar de oriente a occidente en una ciudad auténticamente mediterránea. Sin duda este es un hogar con personalidad y lo han conseguido gracias a su Pepito Grillo de la decoración, Bárbara, su interiorista.

comedor con marcos de foto de madera y mesa puesta

Ella lo tenía claro: resaltó la parte original del piso añadiendo toques nórdicos y, por supuesto, algunos recuerdos que han traído directamente de Shanghái. Sandra y Marc trabajan desde casa y necesitaban un espacio amplio para trabajar así que cambiaron la distribución del dormitorio y el comedor para ganar un amplio comedor-despacho. ¡Qué bonito es regresar a casa!