Tener las ideas claras es algo que a veces cuesta, pero ¡ayuda tanto! La dueña de esta casa, Patricia, lo tenía clarísimo: "Quería un salón grande y que la cocina tuviera una isla y una cristalera". ¡Deseos concedidos! La interiorista Asun Antó y el estudio de arquitectura Crea.house trabajaron codo con codo con ella para planificar a fondo cada detalle. Y el resultado no podría haber sido mejor.
La decoradora destinó toda la planta de abajo a zona de día, con una gran cocina que integra el comedor de diario, "muy al estilo americano". Y reservó las habitaciones para la planta superior. Precisamente desde arriba nos llegan las risas de Pablo y Borja, los hijos de Patricia, que han convertido su cuarto en una gran sala de juegos. Y es que en esta casa, la calma que se respira en cada estancia solo la rompen las risas de sus habitantes.