Pues sí, la magia existe. Y sino, ¡bien atentos! Mirad cómo las luces consiguen que este jardín se convierta en un escenario de cuento. Si es que solo faltan las hadas o los renos paseándose por aquí y allí. ¿Y sabes qué? Tú también puedes hacer magia.
Para empezar, envuelve el tronco de un árbol o de una planta con tallo grueso con guirnaldas de luces como estas de led. Cuantas más, ¡mejor! Añade portavelas y candelabros sobre las mesas, farolillos de distintos tamaños sobre el suelo o colgados y también una gran pantalla de lámpara con forma de estrella. Y, para estar bien cómodos, coloca cojines y mantas de pelo sobre los asientos. ¡Verás qué gusto!
Espera a que se ponga el sol y ¡listos para que empiece el espectáculo! Esta Navidad llena de magia tu jardín, tu terraza o tu balcón con mucha luz.