Todos estaremos de acuerdo en lo importante que es tener orden y organización en todas las estancias de la casa. Pero si hay una estancia en la que el desorden está aún más prohibido, esa es el recibidor. Como su nombre bien indica, el recibidor es quien se encarga de recibir a nuestros invitados, es quien da esa primera impresión de la energía que fluye en la casa. Además, hablando de energías, y según el Feng Shui, es a través de la puerta de entrada por donde entra esa buena energía, otro motivo más para mantener esta zona ordenada. Para ayudarte a poner un poco de orden en esta área del hogar, te dejamos, a continuación, 7 cosas que Marie Kondo nunca tendría en el recibidor de la entrada.

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1.

Un mueble demasiado grande

Un mueble demasiado grande

Un mueble demasiado grande

El Mueble

Un mueble de grandes dimensiones quita mucho espacio de la entrada de la casa. Si necesitas almacenaje, puedes optar, por ejemplo, por una o dos cestas de mimbre, quedan mucho mejor, ocupan menos y son más elegantes.

2.

Llaves sueltas

Llaves sueltas

Llaves sueltas

El Mueble

Es muy común que, cuando llegamos de la calle, soltamos todas las llaves, las del coche, las del trastero, las de casa, las del garaje, encima del mueble del recibidor. Esto, aunque nos resulte muy cómodo, le da un aspecto bastante desordenado a la entrada de la casa. ¿Lo mejor? Pues, por ejemplo, puedes poner un bonito plato decorativo y meterlas en él. De todas formas, intenta que no sean muchas para que te quede todo más recogido y organizado.

3.

Abrigos desordenados

Abrigos desordenados

Abrigos desordenados

El Mueble

Es verdad que tener los abrigos a mano en la puerta de la entrada para cogerlos, rápidamente, antes de salir de casa es muy útil y nos ahorra mucho tiempo. Como consejo, no acumules en el recibidor abrigos por acumular, deja uno o dos, los que realmente más utilices. Y si puedes colgarlos en percheros decorativos simples y elegantes, mejor.

4.

Zapatos mal puestos

Zapatos mal puestos

Zapatos mal puestos

El Mueble

En muchas casas, se practica la tradición asiática de dejar los zapatos en la puerta de entrada, así evitamos transmitir la suciedad de la calle que traemos en las suelas de los zapatos. Pero aquí pasa como con los abrigos: no dejes los zapatos tirados y en medio como una leonera, deja solo uno o dos pares y guárdalos, por ejemplo, en un coqueto zapatero pequeño que no ocupe mucho espacio.

5.

Plantas demasiado grandes

Plantas demasiado grandes

Plantas demasiado grandes

El Mueble

Está bien decorar el mueble del recibidor, o incluso el suelo, con plantas de interior, es una forma muy elegante y llamativa de darle la bienvenida a tus visitantes. Pero, aunque digamos sí a las plantas en la entrada de la casa, no abuses con su tamaño, mejor plantas pequeñas y sutiles que no agobien.

6.

Cartas

Cartas

Cartas

El Mueble

Sabemos que las cartas pueden ser cosa del pasado, hoy en día la mayoría de notificaciones las recibimos por correo electrónico. Como todavía quedan empresas, un poco anticuadas, que envían cartas por correo ordinario, de vez en cuando podemos encontrarnos alguna que otra en el buzón. Consejo: ábrela en el momento, léela y guárdala si te sirve y, si no, deshazte de ella, pero, por favor, no la dejes encima del mueble del recibidor. Bueno, como mucho, te dejamos que coloques una bonita caja de almacenaje para mantenerlas ordenadas.

7.

Juguetes de los niños

Juguetes de los niños

Juguetes de los niños

IKEA

Cuando hay niños en casa, es normal que cueste un poco más tener el recibidor, y la casa en general, en orden. Pero, sinceramente, la entrada de la casa da muy mala impresión si lo primero que se ve, al entrar por la puerta, es una montaña de juguetes infantiles. Lo mejor es que los niños aprendan a mantener sus cosas ordenadas y guardadas en su habitación. Posdata: un juguete para usar en la calle, como un monopatín que es compacto y ocupa poco sitio, sí estaría permitido.