El 1 de junio cambia la tarifa de la luz. ¿Por qué? La idea principal de la nueva regulación de tarifas eléctricas es que los consumidores tenemos que optimizar o usar mejor la energía.
Para entendernos, digamos que el precio mayorista en el mercado de la luz varía cada hora del día. Es decir, la tarifa de la luz cada hora puede ser diferente. Hasta ahora, esos cambios no nos afectaban a la mayoría de los hogares porque, normalmente, no hacemos uso de la discriminación horaria. Pues eso es justamente lo que cambia.
¿La factura de la luz va a ser más cara o más barata?
Entonces, ¿la factura va a ser más cara o más barata? Depende. Si hasta ahora tu factura tenía el mismo precio las 24 horas del día, probablemente ahorres. Se calcula que unos 24 euros al año. Si por el contrario eras de los que ya utilizaban la discriminación horaria, lo tienes más difícil. De hecho, se calcula que, en este caso, la subida media será de 34 euros al año.
Los 3 tramos horarios en la nueva factura
La electricidad ya no va a costar lo mismo todo el día, ni todos los días. La nueva factura distingue entre los siguientes horarios:
Cuánto cuesta la luz de lunes a viernes
TARIFA VALLE, la más barata
La noche es el horario más barato. Comprende de las 0:00 horas a las 08:00 de la mañana.
TARIFA LLANA, la intermedia
Un horario barato, pero no tanto como la noche. Es como "una ventana", en las horas más habituales de desayuno y comida.
Va de las 8:00 a las 10:00, de las 14:00 a las 18:00 y de las 22:00 a las 0:00 horas.
TARIFA PICO, la más cara
Si usas la luz sin planificarte y cocinas o pones la lavadora en este horario punta, es cuando más caro te saldrá. Va de las 10:00 a las 14:00 y de las 18:00 a las 22:00 horas.
Cuánto cuesta la luz sábado y domingo
Durante todo el fin de semana tendremos Tarifa Valle, la más barata, durante las 24 horas. Es importante tenerlo en cuenta, porque puede ser buen momento para cocinar para toda la semana (hacer batch cooking), poner lavadoras, secadoras...
Cómo ahorrar con las nuevas tarifas
Tendremos que hacer un esfuerzo de adaptación y de planificación de lo que más consume luz en casa. Parece difícil, pero se puede.
Nuestros dos consejos principales son:
Desplaza todo el consumo posible al horario valle (0-8h y fines de semana)
- Una buena costumbre es programar lavadoras, secadoras, lavavajillas y todo lo que puedas al horario nocturno.
- Aprovecha también este horario para cargar todas las baterías (tablets, móviles, patinetes y, sobre todo, el coche eléctrico, si ya te has pasado a la movilidad verde). El horno mejor reservarlo para el fin de semana.
- Si no puedes ajustarte tanto, al menos evita los consumos fuertes en los dos tramos más caros (de 10 a 14 y de 18 a 22)
Contrata dos potencias
Esto es una novedad. Ahora se podrá contratar 2 potencias, una para el horario diurno y otra para el nocturno, el horario más barato. Así, esos consumos desplazados a las noches o fines de semana, te pueden salir aún más baratos.
Para ello, en las nuevas facturas, es obligatorio que aparezca la potencia máxima que has consumido en los últimos 12 meses.
Muchos de nosotros tenemos potencias demasiado altas, en torno a los 4,6Kw/h y no solemos pasar de picos de consumo de 3Kw/h.
Si nunca te han saltado "los plomos" (es un decir porque ahora no salta nada en el cuadro, es una desconexión digital) es que tienes una potencia que nunca se acerca al máximo, es decir, te sobra potencia. Comprueba cuál ha sido tu consumo máximo en la nueva factura y, si puedes, baja tu potencia.
¿Las nuevas tarifas son para todas las compañías?
Sí, todas las compañías están obligadas a facturar en 3 periodos. No obstante, las comercializadoras de electricidad del mercado libre pueden aplicar los cambios con cierta libertad. Sin embargo, las empresas del mercado regulado cambiarán automáticamente su tarificación. Te lo explicamos:
Si ya tienes una compañía del llamado mercado regulado, simplemente tu tarifa cambiará a los nuevos horarios, verás en tu factura esa división y el precio de cada tramo.
- Recuerda que, hasta ahora, todos los estudios de organizaciones de consumidores destacan que el mercado regulado es más barato que el mercado libre, a pesar de las ofertas que lanzan las compañías. Es cierto que este mercado tiene un precio que oscila según cambia el precio de la electricidad mayorista.
- Así, en momentos puntuales, el precio sube como pasó con la tormenta Filomena que anuló la producción fotovoltaica por unos días y el precio de la luz se disparó. Pero salvo momentos puntuales, este mercado es ventajoso para los hogares. El mercado regulado solo lo componen las siguientes comercializadoras: Energia XXI, Curenergia, Regsiti, Baser Cor, Gas & Power, CHC Cor, Teramelcor...
Si tu compañía es del mercado libre, infórmate de cómo va a cambiar su tarifa a partir del 1 de junio.
- Está por ver cómo se adaptan las compañías y si lanzan ofertas como hasta ahora que ofrezcan tarifas planas o similares. Pero como decíamos, hasta ahora, ninguna compensa los precios del mercado regulado para un consumo medio anual. Las ofertas puntuales de uno o dos meses gratis se suelen hacer para captar clientes y suelen conllevar un periodo de permanencia.
- Si tienes una de las llamadas “tarifas indexadas” significa que estás en el mercado libre pero que tu compañía te cobra el precio de mercado regulado sumándole una pequeña cantidad mensual por la gestión. Lo más lógico en este caso es que la compañía te facture en los nuevos tres tramos horarios manteniendo el cobro extra por la gestión. Pero asegúrate de que te informan sobre los nuevos precios.
Por último hay que tener en cuenta que, las tarifas eléctricas más baratas no suelen ser las más ecológicas. En tu factura puedes ver la procedencia de tu electricidad. Si quieres que tu electricidad venga solo de fuentes renovables tienes que buscar en el mercado libre una compañía que te lo garantice.
Entender la factura de la luz, todo un reto
La factura de la luz va a seguir siendo complicada, así que te recordamos los conceptos principales para entenderla:
Compañía y datos de la factura
Son los datos que encabezan la factura. Por un lado, está el resumen de la factura, con el importe final, el número de la factura, el periodo de consumo –pasa de bimestral o mensual con el nuevo contador con telegestión– y la fecha en que se cargará a cuenta el importe.
Y, por otro lado, la información de la compañía comercializadora... que no distribuidora. ¿Sabías que con cada factura pagamos a dos empresas distintas? La distribuidora y la comercializadora. Una la podemos elegir y la otra no. ¿La diferencia?
Comercializadora
Es la compañía que compra la electricidad a la empresa que la genera y con quien tenemos el contrato de electricidad y, por lo tanto, quien nos factura. Somos libres de escoger la compañía que más nos interese.
Distribuidora
Es la encargada de la red eléctrica que lleva la luz hasta nuestra casa. Se ocupa del mantenimiento de la red de suministro, de leer los contadores y de la calidad del servicio. Esta compañía dependerá de la zona en la que vivas y, por lo tanto, no se puede elegir. En España existen, principalmente, cuatro grandes distribuidoras: Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa y E.ON.
Resumen de facturación
Es habitual mostrar de manera breve el desglose de la factura: la potencia contratada, la energía consumida, el impuesto de electricidad, el alquiler de los equipos, el IVA... Cada compañía decide el nivel de desglose que quiere que aparezca en esta sección, por lo que es probable que la información varíe entre una y otra.
Información e historial del consumo eléctrico
Suele ilustrarse con un gráfico en el que se muestra cómo ha ido evolucionando el gasto en Kwh a lo largo del último año. Además, en algunas facturas, se suele añadir una estimación media de los consumos diarios y del consumo acumulado en el último año.
Este gráfico es una buena manera de comparar tu consumo actual con el del mismo mes del año pasado y comprobar si la tarifa que tienes contratada se ajusta realmente a tus necesidades actuales.
Datos del contrato
Aquí es dónde se entra en el meollo de la cuestión, porque buena parte de lo que pagamos cada mes de electricidad depende de este recuadrito de la factura. ¿En qué debemos fijarnos?
Tipo de contrato
Actualmente existen cuatro tipos de contratos o modalidades de tarifas:
1. PVPC (mercado regulado)
El Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) es el sistema de fijación del precio de la energía eléctrica se aplica en la factura de aquellos consumidores con una potencia contratada no superior a 10 kW, casi todos los hogares.
Con este sistema de PVPC el consumidor paga por su consumo, durante un periodo de facturación, el precio resultante en el mercado eléctrico. Según datos del año pasado de la CNMC, más de 46% de los hogares españoles tiene contratado este sistema.
2. Contratación en el mercado libre (modalidad no regulada)
Se trata de un contrato en el mercado no regulado o libre, por lo que el precio y condiciones serán pactados entre el consumidor y la comercializadora de mutuo acuerdo en el contrato. Pero ojo, que el mercado sea libre no significa necesariamente que ofrezca precios más bajos que el mercado mayorista o el regulado.
3. Bono Social
Se trata de una tarifa más económica solo válida para ciertos colectivos considerados vulnerables –personas pensionistas con prestaciones mínimas, familias numerosas o con todos sus integrantes en desempleo...– y los consumidores con menos de 3 kW de potencia contratada. Dichas personas tendrán derecho a la tarifa resultante de aplicar a su suministro el PVPC un descuento del 25%.
Peaje de acceso
La tarifa de peaje se determina según la potencia contratada. A partir del 1 de Junio, todas las tarifas de menos de 10 o 15K pasan a tener el mismo peaje, llamado 2.0TD unificando los antiguos peajes (DHA, DHS o A).
Potencia contratada
Lo habitual es tener una potencia entre 3.3 y 4.6 kW. Por debajo de 3 kW se puede pedir el bono social, y por encima de 10 kW ya no se tiene derecho a la tarifa PVPC del mercado regulado. Aquí la novedad es que se podrá contratar 2 potencias para diferentes horarios.
Referencia del contrato de suministro
Es un dato básico para identificarte. Aunque en muchos casos resulta más útil el CUPS (Código Unificado de Punto de suministro), porque este código identifica tu instalación y se mantiene aunque cambies de comercializadora.
Detalle de la factura
El recibo de la luz esté formado, básicamente, por dos importes: un coste fijo por disponer de electricidad, que se paga por cada kW de potencia contratada. Y otro variable, que es el coste de la electricidad consumida.
Facturación por potencia contratada
Hayas consumido electricidad o no, es un importe que pagas siempre. Por eso, cuanto mayor sea la potencia contratada, más elevada será esta suma a final de mes. Esta facturación se divide en dos conceptos: importe por peaje de acceso e importe de los costes de comercialización. En ambos casos se multiplican los kW contratados por el precio diario y el número de días facturados.
Facturación por energía consumida
Del importe total de la factura, este es el que corresponde solo al consumo efectuado ese mes (o meses, en el caso de tener un contador antiguo). En el mercado regulado se divide en dos conceptos:
- Importe por peaje de acceso: Se calcula multiplicando los kWh consumidos durante el periodo de facturación por el precio del peaje de acceso,
- Importe del coste de la energía: Es el resultado de multiplicar los kWh consumidos durante ese periodo por el precio del coste horario de energía del PVPC. Este coste cambia en cada factura, en función del precio de la energía en el mercado mayorista para ese periodo.
Impuestos y alquiler de equipos
Impuesto sobre la electricidad
Se trata de un impuesto especial cuyo tipo impositivo viene fijado por Ley. Desde el 1 de enero de 2015 es del 5,1127%.
Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)
A la suma de todos los conceptos anteriores, se aplica el IVA vigente, que es del 21%.
Alquiler de equipos
Está regulado por el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital y se calcula multiplicando el número de días del período de facturación (ojo, en las facturas mensuales suele ser de 40 días, no de 30) por el precio del alquiler del contador, a no ser que sea tuyo.
Ahora que ya sabes qué pagas y por qué, si te interesa saber cómo reducir tu facturas doméstricas, no te pierdas estos consejos: