Pocos estilos decorativos son tan alegres, vitalistas y divertidos como el bohemio. Colores vibrantes, fusión de culturas y épocas, libertad decorativa, mezcla de estilos... Un mix en el que lo hippy, lo étnico y lo oriental conviven con naturalidad creando atmósferas únicas y muy personales. Sin embargo, al ser un estilo de alma rebelde que invita a saltarse las normas establecidas, corre el peligro de desembocar en espacios abarrotados, sin sentido y un tanto kitsch.
Una variante del estilo bohemio que huye precisamente de esta estética caótica es el boho chic. Este estilo parte de la misma base decorativa que el bohemio, pero matizada por elementos elegantes y sofisticados (de ahí lo de chic) que suavizan los excesos propios del estilo bohemio.
Colores sí, pero sin caer en una decoración tipo arco iris. De hecho, en las decoraciones boho chic predominan las paredes de tonos neutros (como esta propuesta de Pinterest), que se convierten en el lienzo perfecto para colorear la estancia con los complementos. ¿Mezcla de estilos? ¡Por supuesto! En este sentido, la tendencia mix & match le va al dedillo, pero con mesura, no todo vale. Tampoco pueden faltar los cojines, las alfombras y los motivos étnicos –que además están muy de moda–, ni los materiales y las texturas naturales. Con todos elementos, ¿te atreves a darle un matiz boho chic a la decoración de tu casa?