36 ideas baratas para renovar tu dormitorio: ¡parecerá otro!

...¡pueden convertirse en un cabecero bohemio muy personal! Solo tendrás que limpiarlas bien. Incluso puedes dejarlas sin pintar, como estas. Sus desconchones todavía las hacen más auténticas. Con ellas protegerás la pared y redefinirás el estilo de tu dormitorio. 

Dos auxiliares distintos de poca altura pueden convertirse en las perfectas mesitas de dormitorio. Y no hace falta ni que sean del mismo material. Fíjate en cómo queda este par de mesas en el dormitorio decorado por Equipo Nimú. 

No necesitas gastarte un dineral en una mesita de noche. Un taburete es una solución. De madera en bruto o de cuerda. Se llevan los toques rústicos. Y si no te cabe la lámpara, cuélgala del techo, ponla como aplique o elige un modelo de pie que no compita visualmente con el taburete, o sea, delgado y claro. Cabecero diseñado por el estudio de Mercedes Postigo. Lámpara de pie y taburete a modo de mesita, en El Globo. Espejo, en India & Pacific.

¿Que tienes un dormitorio demasiado frío? Alfombra. ¿Que es muy amplio y desangelado? Alfombra también. Y es que una alfombra abriga (aunque sea de fibras) y a la vez, enmarca la zona de descanso. Colócala grande y que sobresalga unos centímetros alrededor de la cama. Mesita de noche, de Kintoc. Lámpara bombilla, de Denoe Design y alfombra, de Ikea. Dormitorio decorado por Mäinities.

¿Te gustan las escaleras de madera decorativas? Empezaron siendo un plus de almacenamiento en el baño para colgar las toallas pero poco a poco esta tendencia se ha ido extendiendo por toda la casa por la calidez y la funcionalidad que aportan. Si colocas una en el dormitorio te servirá por ejemplo para dejarte preparada la ropa del día siguiente o tener a mano un plaid, si os echais la siesta. Esta propuesta es de la decoradora Marta Tobella. Cabecero, ventilador y escalera, en Sacum.

Olvídate de mesitas y lleva la superficie de apoyo a la pared del cabecero. Cuanto más alta y ligera como esta balda, más airosa se verá la habitación. Y las lámparas, también pueden acompañarla. Además, bañando las paredes de luz, estas parecerán alejarse y tu dormitorio parecerá más grande. Espacio decorado por Marta Torres. Banqueta, de Sacum. Lámparas aplique, de Maisons du Monde. 

Sí, las plantas decoran y dan frescor también en el dormitorio. Grande o pequeña, si es natural ponla cerca de la ventana para que disponga de luz y aléjala de corrientes. No hace falta que la saques fuera por la noche porque no te quitará oxígeno. ¿Qué tienes alergia y prefieres un modelo artificial? Nada que objetar. Son perfectas y dan el pego. La sensación de ambiente fresh será la misma.

Si tienes un armario que ya no te sirve, antes de tirarlo o donarlo piensa si lo puedes acoplar en otro lugar de la casa haciéndole algún cambio sustancial que se adapte a las nuevas necesidades. Si eliminas algunos paneles y dejas en pie solo su estructura obtendrás un armario abierto con sus baldas que te puede venir bien en el dormitorio. Dale una mano de pintura y ¡parecerá otro! Este es el modelo Hemnes (99 €), de Ikea.

No hay truco más barato y efectivo. Y si no quieres taladrar la pared, apóyalo sobre cualquier pieza que tengas: un tocador como este o una cómoda servirán. Y si no los tienes, opta por un espejo grande (aunque tu dormitorio sea mini) y apóyalo en el suelo. Tocador y espejo, de Azul Tierra. Proyecto decorado por Mäinities.

Algunos elementos estructurales como columnas y pilares resultan imposibles de eliminar por ser de carga. Seguro que sabes de lo que te hablo porque tienes alguno en el dormitorio de tu hijo. Si lo has aprovechado para separar la zona de descanso del de juegos como el de la imagen, podrás sacarle más partido con estas dos ideas. Una, decora el pilar revistiéndolo de madera a la mitad y empapelando la otra mitad con un papel vistoso. Y dos, fija en uno o dos lados una estantería que le sirva para tener los juguetes que más utiliza a mano. Pónsela a su altura para facilitarle la tarea y la devolución a su sitio cuando termine de jugar.

No es caro (unos 30 €/m2) y en un solo día lo puedes tener montado. Dejando huecos para poder acceder a los interruptores tendrás la mesita de noche perfecta, sin necesidad de comprar un mueble aparte. 

Tendrás un elemento que te hará más fácil vestirte día a día porque te podrás ver entero. Además, el espejo agrandará la habitación y potenciará la luz. Y ya que lo hemos colocado sobre una corredera... hablemos de ella: ganarás 1 m2 para pasar con más comodidad. ¡Qué más se puede pedir! Piso reformado por el arquitecto Antonio Cortines y decorado por Emma Massana. Cabecero de madera y algodón aterciopelado, de CM Textiles. Lámparas, de Marset y Dab. Revestimiento de madera de roble.

¿Tienes un hueco junto al armario, una columna o tras la puerta? Un sistema de baldas como este podrá crear un estudio mini perfecto. Las baldas son muy económicas y versátiles. Añade una silla ligera y el conjunto será práctico y no ocupará visualmente. Diseño realizado por el estudio de Mercedes Postigo. Lámpara, de Luz & Ambiente.

No le pongas frentes. Apuesta por unas cortinas. Truco barato y decorativo donde los haya. Elige unas que corran fácilmente para ayudarte en el día a día. Y aprovecha para decorar el dormitorio con complementos que tengan el mismo color que la tela de las cortinas. Así todo encaja. Es tan económico como tener un armario abierto, pero sin serlo del todo. 

Si tu dormitorio presenta una distribución irregular o abuhardillada, aprovecha ese recoveco del lado de menor altura para crear una estantería de obra. Dos o tres baldas serán suficientes. Aunque su tamaño sea mini, te proporcionará ese espacio extra para tener a mano los libros que te quedan por leer, el despertador y algún objeto decorativo que quieras tener más a la vista. Y si colocas un espejo en el estante inferior y un banco para sentarte tendrás además un tocador en toda regla. 

Tener un baño dentro del dormitorio resulta súper práctico y contar con un vestidor es un privilegio. Si tienes espacio para crear uno, déjalo abierto. Puedes darle privacidad sin necesidad de colocar una puerta, unas cortinas de lino serán suficientes, como se hizo en este proyecto del Estudio Hoc Volo. Aunque es normal que tu mirada se haya detenido en el espectacular mural del cabecero, un mapa mundi XL que hará las delicias de los espíritus más viajeros. Mesillas de noche y mural, del Estucio Hoc Volo. Ropa de cama, de Sandra Marcos y edredón, de Pez.

Algodón y lino son los dos tejidos que te van a ayudar a aligerar tu dormitorio esta temporada. Fíchalos para renovar tu ropa de cama, visillos y cortinas, apuesta por colores vivos y estampados alegres que te hagan estar en modo optimista todos los días.Funda nórdica con funda de almohada Grand de algodón sostenible (65,95 €/cama de 150 cm), colcha Montecarlo (99,95 €/150 cm) y cojines Velvet, en terciopelo de algodón y Sidney, en espiga de lino (desde 15,95 €). Todo, de El Corte Inglés.

De acuerdo, una cama canapé no es barata, pero a la larga sí lo será. ¿Por qué? Porque te evita necesitar más piezas de almacén exentas como una cómoda, una cajonera, un armario extra... Para que sea ultrapráctica, utiliza cajas y fundas para mantener lo que guardes bien ordenado. Canapé, de Kibuc. Banqueta, de Ikea.

¡Que haya papel! Apuesta por estampados que le den vida a tu cuarto, luz y un toque de actualidad. ¿Qué tal los que tienen dibujos de hojas verdes? El look urban jungle se lleva, y mucho. Papel pintado, de Lara Costafreda para Coordonné. Dormitorio decorado por Cristina Mendoza.

Es una pieza muy versátil. Además de tener mucha profundidad para almacenar lo que necesites, un baúl colocado a los pies de la cama es la perfecta banqueta. También puedes colocar un baúl o un banco con almacenaje bajo la ventana para aprovechar un espacio que suele quedar sin uso. Con unas colchonetas y unos cojines en el respaldo lo conviertes en una zona de lectura coqueta y comodísima. Estantería Ivar, cama Brimmes, cabecero y baúl Stuva, de Ikea. Lámpara, de Cado.

Una decisión muy fácil de tomar y que multiplicará tus opciones para guardar en el dormitorio. Y no te agobies porque quede más alta que la cama. No es problema. De hecho, el efecto decorativo de una cómoda junto a la cama es muy bonito y te será igual de práctica para dejar el libro y el despertador. 

Si quieres que la primavera se instale en tu casa de una vez por todas, elige tonos pastel y estampados florales en formatos maxi y mini para renovar los textiles y los objetos decorativos de tu dormitorio. ¿Además, te sientes creativa? Dales una segunda oportunidad a esos palés que tienes en el trastero y crea un banco con almacenamiento a los pies de la cama o toda una tarima, como esta de la imagen. Funda de cojín estampado de flores rectangular y cuadrado (9,99 €), cojines lisos con borlas (9,99 €), jarrones de cerámica en tonos pastel (desde 3,99 €), plaid rosa empolvado (17,99 €), cestas maceteros (desde 17,99 €) y palés para la tarima (79 €/unidad). Todo pertenece a la colección Floral Impression, de Muy Mucho.

La encontrarás fácilmente. Ve a un almacén de derribos o visita desembalajes que se hagan cerca de tu casa y podrás conseguirla. Llévala a un cristalero y que te coloque un espejo, y ya la tendrás. Si la colocas para que refleje el exterior, ganarás luz, vida y sobre todo, mucha más profundidad. ¡Genial!

Si eres un manitas, esta es una solución ultradecorativa, cálida y muy barata para tu dormitorio. Una franja alargada de trapillo trenzado, colgada con ganchos de la pared, la protegerá de roces y aportará calidez a tu cuarto. 

¿Qué se puede hacer en esos dormitorios pequeños en los que apenas hay espacio a los lados para colocar unas mesillas de noche? Una buena solución es disponer unas estanterías voladas en la pared que den la impresión de flotar en el aire. Elígelas de formas geométricas, como estas hexagonales para dar dinamismo al ambiente. En ellas tendrás sitio suficiente para disponer una lamparita, tu libro de cabecera y un vaso de agua por si te entra sed por la noche.

Si tienes un vestidor de pared a pared ¡enhorabuena! pero a lo mejor no te sientes tan afortunada cuando vas a buscar algo por la mañana y no quieres dar la luz general para no molestar a tu pareja. Pon unas tiras leds en zonas estratégicas del armario, por ejemplo en la parte superior de cada estante para que puedas encontrar todo a la primera sin despertar a nadie. ¡Más fácil, imposible!

El dormitorio de invitados es tan pequeño que apenas cabe un armario, ni siquiera uno abierto tipo burro de los que tanto se llevan ahora. ¡Y claro cómo vas a invitar a alguien a tu casa si no puede ni deshacer la maleta! Un armario de obra puede ser la solución: reparte baldas de diferentes tamaños por toda la estructura de la puerta con zonas para colgar y otras para apilar. Eso sí, necesitarás una escalera con riel para llegar a las partes más altas.

Puedes gastar dinero en un colgador trendy o puedes hacértelo tú mismo con unos trenzados de macramé y una simple rama de árbol. El resultado es así de bonito. Eso sí, no le cuelgues piezas en cualquier percha. Que sean de madera y, sobre todo, todas iguales. Así el conjunto será de 10.